Más de 2.000 norteamericanos aficionados a las carreras fueron encuestados por el Sema -Specialty Equipment Market Association- lanzando unos interesantes resultados sobre qué dirección podría tomar el mercado norteamericano (referente en el aftermarket) a pesar de la crisis que afecta a la industria.Una cuarta parte de los preguntados explicaron que en el 2009 seguirán participando en eventos racing y relacionados con el automovilismo, cifras similares a las que se obtuvieron el año pasado.
Segmentando a los encuestados por el tipo de coche se pueden encontrar similitudes dentro del grupo y estudiar separadamente las tendencias que pueden seguir. Por ejemplo, los propietarios de vehículos made in USA son ligeramente más mayores que los que conducen marcas japonesas y coreanas, pero más jovenes que los que poseen coches europeos. Esto, que puede atribuirse a que los vehículos europeos tienen un precio inicial mayor, también podria explicar una mayor bajada de los accesorios para marcas japonesas y coreanas (el segmento más joven es el que está teniendo más problemas económicos en estos momentos en los EEUU) y de su presencia en este tipo de eventos respecto al resto.
Por otra parte que la antiguedad media, mucho mayor en los coches nacionales que en el resto, se explica claramente por la antigüedad de estos coches en el mercado de segunda mano de los aficionados a las carreras (1932 para los nacionales, los 70 para los japonenes y los 50 para los europeos.
A pesar de todo lo anterior, cuando se preguntó por cual seria el segmento que triunfaria este 2009 la gran mayoría coincidió en que serían los muscle cars las estrellas.
Las tendencias que recibieron votos fueron la preparación deportiva (lógico preguntando a aficionados al tema), los detalles y la restauración, hobby con mucha tradición en Norte America.
Sin embargo si se encontraron discrepancias entre los propietarios de marcas asiaticas, que situaron las modificaciones DIY (hazlo tú mismo) en segunda posición, lo que refuerza lo que comentábamos antes. La manera de que este segmento continúe con su deporte es equilibrar la balanza entre rendimiento y el desembolso.
Un equilibrio que seguramente también veremos seguir en el mercado del tuning
